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Problemas de salud

Dolor del pie

Dolor del pie

El dolor del pie en los atletas jóvenes es un problema común que se encuentra en todos los deportes. Muchas lesiones son específicas de determinados deportes, mientras que otras se observan en todo tipo de actividad, especialmente las que involucran carreras. Las lesiones pueden involucrar huesos, ligamentos, tendones u otras estructuras de tejidos blandos en el pie.

Lesiones del pie

Las lesiones del pie pueden ocurrir repentinamente (agudos) o desarrollarse gradualmente con el tiempo (crónicos). Los ejemplos de las lesiones agudas son fracturas, dislocaciones y magullones/hematomas (contusiones). Estas lesiones ocasionan dolor inmediato y pérdida de la función. Los ejemplos de las lesiones que se desarrollan con el tiempo son fracturas por estrés y tendinitis. Con frecuencia se les describe como lesiones molestas que empeoran con el tiempo y no se ha determinado una causa específica.

Qué se debe hacer cuando un atleta sufre una lesión del pie

Para las lesiones graves agudas en donde se sospecha de una fractura, el atleta deberá ser evaluado por el personal médico inmediatamente. También es importante que examinen si existe alguna señal de movimiento alterado, sensación o flujo de sangre hacia las áreas distantes a la lesión. Para la mayoría de las otras lesiones, trate de descansar, hielo y compresas (compresas ACE, etc.) y elevar el pie. Si no se observa mejora en el término de 2 a 3 días y el atleta está cojeando, tiene hinchazón o dificultades para realizar las actividades normales, deberá ser evaluado para descartar una lesión más seria.

¿Qué hará mi médico para diagnosticar y dar tratamiento a la lesión de mi pie?

Su médico le hará varias preguntas sobre cómo empezó el dolor del pie, en dónde está ubicado y qué empeora el dolor. Su médico examinará su pie para identificar la lesión que sufrió. Con frecuencia, los rayos X son necesarios para ayudar con el diagnóstico al igual que otras pruebas que se usan ocasionalmente (exploración ósea, resonancia magnética, etc.).

Tratamiento y regreso al juego

Todo tipo de lesión de piel tiene un tratamiento específico y su médico empezará esto una vez se haga el diagnóstico. Es posible que su médico necesite referirlo a un especialista de medicina deportiva o a un cirujano ortopédico para una mayor evaluación y tratamiento. En general, los atletas pueden regresar con seguridad a sus actividades cuando puedan pasar la "prueba de los 5 pasos", que puede realizarse rápida y fácilmente en el  consultorio del pediatra. El atleta deberá poder (1) caminar/correr con un rango completo de movimiento, (2) caminar de “puntillas” sin dolor, (3) saltar sobre ambos pies sin dolor, (4) saltar sobre el pie afectado sin dolor y (5) mostrar equilibrio satisfactorio mientras se para en un solo pie del lado afectado. Aunque es posible que el atleta no se haya recuperado completamente hasta este momento, pasar esta simple prueba usualmente indica que el atleta puede regresar a jugar con seguridad y eficiencia.

La prevención de las lesiones del pie

Muchos tipos de lesiones le pueden impedir regresar (al deporte) en el futuro. Algunas cosas que ayudan a evitar las lesiones en general son el estiramiento antes de la actividad, usar los zapatos adecuados, buena nutrición, etc. Otras medidas pueden incluir vendas (cintas) o refuerzos, plantillas, etc. Su médico puede aconsejarle la mejor forma de evitar que su lesión en particular vuelva a aparecer. Además, las siguientes sugerencias para comprar zapatos pueden ayudarle a encontrar el mejor calzado para usted:

  1. La mejor forma de obtener el zapato para correr apropiado es pasar tiempo en una tienda especial para carreras y pedir ayuda de un vendedor que sepa qué es correr. Deberán verlo caminar sin los zapatos o calcetines y preguntarle cuánto y en dónde corre. 
  2. Pruébese los zapatos para correr posteriormente en la tarde o noche cuando sus pies estén hinchados y extendidos por el día. Los pies de los corredores se hinchan y expanden cuando corren. No se sorprenda si sus zapatos para correr son medio número o un número más grandes que sus zapatos de diario. 
  3. Pruébese varias marcas de zapatos que sean apropiados para su tipo de pie y estilo de carrera. También le ayudará llevar sus zapatos viejos para correr.
  4. Lleve los calcetines que usa con más frecuencia para correr y las plantillas ortopédicas (insertos personalizados para zapatos), si los utiliza. 
  5. Asegúrese de que el zapato se ajuste correctamente. Los zapatos para correr se sienten cómodos inmediatamente después de que se los pone. El talón deberá ajustarse cómodamente, sin deslizarse. Los empeines deberán estar cómodos, pero no apretados y deberá tener por lo menos un espacio para las uñas de los pies en la punta de su dedo más largo. Esto permitirá que el pie se expanda.
  6. Lleve los zapatos a una carrera de prueba en la tienda antes de comprarlos. 
  7. Una vez encuentra un par de zapatos que funciona para usted, quédese con ellos. Es bueno comprar 2 pares de zapatos y alternarlos para correr. El riesgo de lesiones incrementa con los zapatos nuevos o correr con zapatos gastados. 
  8. Reemplace los zapatos cada 300 a 400 millas (483 -643 km). Aunque puedan parezcan en buenas condiciones, la suela media habrá perdido todo su soporte y amortiguamiento.


Última actualización
2/14/2017
Fuente
Sports Shorts (Copyright © 2005 American Academy of Pediatrics) Conceptual design by the Ohio Chapter, American Academy of Pediatrics
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
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