Omitir los comandos de cinta
Saltar al contenido principal
 
Edades y Etapas

El cambio de pañales

Elegir un buen lugar para el cambio es importante

Cuando decida cambiarle el pañal a su bebé, ya sea en su cambiador nuevo o sobre su cama, es recomendable que prepare el área para tener a la mano todo lo que necesita. Como mínimo, esto incluye un pañal y algunas toallitas húmedas. Aunque los cambiadores son sin duda la norma cuando se trata de ubicación, y algunas personas, incluidas algunas de nosotras, hasta deciden tener más de uno en la casa, debe estar consciente (si aún no lo está) de que son intrínsecamente necesarios. Si decide que no quiere que el cambio de pañal esté limitado al lugar donde se ubica su cambiador, entonces también considere mantener pañales a la mano en lugares convenientes en la casa (y en el carro una vez que empiece a animarse a salir). De ese modo, es posible que quiera restringir​ qué tan lejos tiene que ir para encargarse del asunto. Algunas personas optan por utilizar un simple protector para cambiar pañales en lugar de una mesa y, una vez que se sienta cómoda con la rutina, el piso, el sillón o hasta el asiento trasero de su vehículo puede servir fácilmente para el mismo propósito. Sin embargo, algunos episodios particularmente desagradables pueden requerir no solo un pañal nuevo, sino también un par de manos extra, un cambio de ropa y hasta un viaje a la tina. En dichas ocasiones, le irá mucho mejor si eligió una “estación de cambio” cerca de los artículos necesarios.

La técnica

Antes de empezar a cambiar el pañal de su bebé, tenga en cuenta que algunos bebés tienden a orinarse tan pronto como se les expone al aire. Mantenerlo relativamente cubierto, tanto como sea posible, durante el cambio de pañal, puede ayudarle a evitar que usted, la superficie donde está cambiando el pañal y la ropa de su bebé se mojen sin necesidad. 

Si su bebé se muestra dispuesto a colaborar, lo cual ocurre con la mayoría de los bebés hasta que aprenden a darse vuelta (aproximadamente a los 4 meses de edad), primero levante sus piernas con una mano y ponga un pañal limpio en la parte de abajo con la otra. Asegúrese de que el lado con figuras del nuevo pañal esté al frente y el lado con las lengüetas en la parte de abajo. Luego, desabroche el pañal usado y limpie las nalgas de su bebé con la parte de enfrente (parte interior) a medida que se lo quita. Aunque no tiene que limpiar con el pañal usado antes de quitarlo, hacerlo a menudo le ayudará a quitar una cantidad significativa de heces antes de que use la primera toallita húmeda. Si el pañal usado no está muy sucio, déjelo doblado pero aún debajo de su bebé para que le ayude a evitar que las nalgas aún sucias de su bebé tengan contacto con el nuevo pañal y lo ensucie antes de limpiarlo, y también le servirá para absorber la orina si su bebé se orina al estar descubierto durante el cambio de pañal.

Luego, limpie las nalgas de su bebé y las áreas sucias alrededor con una toallita húmeda, papel húmedo o toallita para lavarse. Luego quite el pañal sucio junto con las toallitas húmedas de abajo de su bebé (si aún no lo ha hecho) y busque un lugar “seguro” para ponerlos de modo que no termine con las heces de su bebé en el pie o se encuentre con un nuevo desastre que limpiar después de tocar accidentalmente el pañal y su contenido en el piso.

Para saber si colocó bien el pañal solo necesita asegurarse de que el frente del pañal esté centrado entre las piernas y que haya halado la parte posterior al menos al mismo nivel de la parte de enfrente, usualmente al nivel del ombligo. Verifique que las lengüetas estén aseguradas uniformemente al frente de modo que no hayan espacios alrededor de las caderas. Además, para ayudar a evitar fugas, asegúrese de que el contorno alrededor de las piernas no esté metido en los bordes elásticos del pañal.

Los protectores desechables para cambiar pañales (disponibles en la mayoría de farmacias y también conocidos como protectores para cama) pueden ser útiles para proteger su cambiador, la cuna, la cama o el lugar que usted elija. Son especialmente útiles cuando está fuera de casa ya que se pueden utilizar primero como un protector para cambiar pañales y luego para envolver el pañal sucio y desecharlo de forma rápida y fácil. Si no está en casa y no le importa lavar una pieza más, puede utilizar fácilmente una toalla para el mismo propósito.

Autor
Laura A. Jana, MD, FAAP and Jennifer Shu, MD, FAAP
Última actualización
11/21/2015
Fuente
Heading Home With Your Newborn, 2nd Edition (Copyright © 2010 American Academy of Pediatrics)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
Síganos