Por Natasha K. Sriraman, MD, MPH, FAAP
¿Se ha sentido triste, ansiosa o abrumada desde que dio a luz? Tal vez ha tenido problemas para dormir o comer. Es posible que se sienta como un robot que simplemente hace las cosas de modo mecánico o que enloquezca cuando alguien se acerca a su recién nacido.
Si alguno o todos estos sentimientos le suenan conocidos, espero que se sienta aliviada cuando escuche con qué frecuencia les ocurre esto a los padres y madres. ¿Sabía que del 50 % al 80 % de todas las personas que dan a luz a un bebé tienen cambios del estado de ánimo conocidos como "baby blues" (melancolía del puerperio)? ¿Y que 1 de cada 8 presentará un caso más grave de depresión posparto?
Estos hechos pueden provocar miedo y confusión, especialmente inmediatamente después de que llegue su bebé. Es posible que sus planes de tener un vínculo maravilloso con su hijo se desmoronen y que cada día parezca una eternidad.
Como madre que ha sufrido depresión posparto en carne propia sin haberla reconocido completamente, se convirtió en mi misión aprender sobre los cambios de la vida que ocurren entorno al embarazo, el parto y esas primeras semanas de maternidad. Todos necesitamos ayuda para atravesar las emociones intensas y los cambios drásticos que son parte de convertirse en padres.
¿Cómo sabré si es depresión posparto?
Muchos padres y madres nuevos me preguntan sobre la melancolía del puerperio, la depresión y cómo distinguirlas. Les explico que los cambios del estado de ánimo son muy comunes después del parto, especialmente las primeras 2 semanas. Lo que distingue la melancolía de la depresión posparto (postpartum depression, PPD) es el tiempo de sufrimiento y cuán gravemente afectada se siente.
Los cambios hormonales que suceden después del parto pueden hacerla sentir increíblemente triste, emotiva, abrumada y confundida. Combine esto con los desafíos de cuidar a un bebé las 24 horas al día, los 7 días de la semana y tiene la tormenta perfecta de factores biológicos desencadenantes que pueden provocar cambios del estado de ánimo.
La melancolía del puerperio tiende a desaparecer después de unos días o semanas, y si bien puede ser aterradora, descansar lo suficiente y aceptar mucho apoyo familiar y social ayuda a la mayoría de las madres a recuperarse. Pero si los sentimientos crudos y la fatiga simplemente no desaparecen, es posible que tenga PPD.
Muchas nuevas madres también sienten una ansiedad que va mucho más allá de solo estar nerviosas por tener un bebé. De hecho, la preocupación excesiva y continua de la ansiedad posparto es tan común como la PPD e incluso pueden darse al mismo tiempo.
¿La depresión puede comenzar antes de la llegada de mi bebé?
Por supuesto. Aunque escuchamos mucho sobre los cambios del estado de ánimo posparto, muchas personas embarazadas se deprimen antes de dar a luz. El nombre de esto es depresión perinatal y es similar a la PPD en cuanto a los síntomas que siente y el tratamiento que puede necesitar.
¿Cómo es la depresión posparto en la vida real?
Las madres que presentan depresión antes o después de dar a luz sienten una profunda tristeza, confusión, pérdida de energía y sensación de desesperanza respecto al futuro. Puede tener arrebatos de ira o momentos en que todo la irrita.
La dificultad para dormir es otro signo de depresión; y si bien siempre es difícil descansar bien con un nuevo bebé, la depresión hace que sea especialmente difícil dormirse y permanecer así. Puede levantarse sintiendo que no durmió en toda la noche, haciendo que deba enfrentar el día sin la energía y el buen humor que hacen que la crianza sea mucho más fácil.
La depresión también puede estar acompañada de cambios en el apetito y en los hábitos de alimentación. Muchas madres recientes no tienen ganas de comer en absoluto o se dan atracones con bocadillos cargados de carbohidratos para obtener energía y consuelo. La cafeína, el azúcar y otros estimuladores a corto plazo empeoran las cosas debido a que pueden interrumpir el sueño y hacer que su energía colapse varias veces durante el día.
La depresión también puede hacer que la persona se sienta agitada y desconfiada, llevándola al límite cuando alguien intenta ayudar con el bebé o hacer quehaceres simples en la casa. Sentir remordimiento, vergüenza y culpa puede hacer que sienta que no merece la ayuda; y es entonces cuando todo puede empeorar.
¿Por qué debo priorizar mi salud cuando tengo tanto de qué ocuparme?
Primero, porque su salud es absolutamente fundamental para la salud, el crecimiento y el desarrollo de su bebé (y también para el bienestar de su familia). Segundo, porque usted merece estar saludable y feliz, especialmente en este momento.
Si se siente culpable mientras lee esto, le animo a que se brinde la misma compasión que tendría con sus seres queridos si estuvieran en su lugar. La crianza no se trata de enterrar sus necesidades mientras satisface las necesidades de los demás. Es un constante flujo de dar y recibir. Necesitar ayuda no la hace una persona débil, pero buscar ayuda es un profundo acto de fortaleza.
¿La depresión posparto solo afecta a las madres primerizas?
Como muchas madres, yo tuve PPD después del nacimiento de mi segundo bebé. No era simplemente porque de pronto tenía dos niños que usaban pañales o porque no podía lograr un sueño reparador. Los cambios que los padres y madres recientes tienen que atravesar con cada nacimiento pueden ser complejos e intensos, de modo que si se pregunta por qué le cuesta adaptarse a que su familia crezca, entienda que a muchísimas madres con experiencia les sucede lo mismo que a usted.
¿Los padres y madres adoptivos a veces se deprimen?
Por supuesto que sí, porque crear o agrandar una familia siempre significa lidiar con fuertes emociones y nuevas rutinas exigentes. Cuidar a un bebé recién nacido no es menos difícil para los padres y madres adoptivos que para los padres y madres biológicos. Y el largo y muchas veces agotador proceso de adopción de un niño puede producir niveles de estrés tan altos, que muchos padres se sienten completamente exhaustos cuando llega el bebé.
Si recién adoptó a un niño y se siente deprimida, no se diga "no deberías reaccionar así". Su familia cuenta con que usted reciba la ayuda que necesita.
¿Dónde puedo obtener un tratamiento eficaz para la depresión posparto?
Considere empezar por su pediatra, que es quien realmente entiende lo que le está sucediendo, tanto desde el punto de vista médico como personal. Si se siente más cómoda hablando con su obstetra, ginecólogo o médico de cabecera, también está bien. También es bueno hablar sobre cómo se siente con alguien cercano en quien confíe, como su pareja, padre o madre, amigo o familiar. Lo principal es no atribuírselo a que es algo normal de la maternidad. Busque ayuda lo antes que pueda, porque la depresión rara vez desaparece sola. No debería aguantarla sin ayuda.
El tratamiento de la PPD o la depresión perinatal puede incluir terapia de conversación, grupos de apoyo y conversaciones con amigos y familia sobre lo que necesita mientras se recupera. La actividad física ligera y las prácticas que brindan tranquilidad, como yoga y meditación, pueden ser útiles. También es posible que le receten antidepresivos, muchos de los cuales son seguros para tomar durante la lactancia.
Tenga en cuenta que estos medicamentos le brindan un apoyo a corto plazo, mientras usted recupera su equilibrio. No son una muleta, simplemente son parte de un plan de tratamiento que millones de personas siguen cuando están sufriendo depresión.
¿Qué sucede si estoy preocupada por la salud mental de mi pareja?
Las parejas también pueden sufrir depresión, de modo que si ve que su pareja presenta los mismos síntomas que mencioné aquí, no permanezca en silencio. Ustedes dos son un equipo, ambos son fundamentales para la salud de su familia. Su pediatra o médico de cabecera pueden ayudarle a encontrar ayuda, ya sea para uno de ustedes o para los dos.
¿Qué debo hacer si tengo pensamientos peligrosos?
Si está considerando hacerse daño a usted o a su bebé, llame de inmediato a la línea nacional de prevención de suicidios al 1-800-273-8255 o al 911. No espere porque estos pensamientos son una señal de que necesita ayuda profesional de inmediato.
La línea nacional de salud mental materna está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana, llamando al 1-833-943-5746. Y para los recursos y apoyos que no sean de emergencia, puede comunicarse con Postpartum Support International. Llame o envíe "Help" por mensaje de texto al 1-800-944-4773.
Recuerde
Los controles de rutina de su hijo son una oportunidad para hablar con el pediatra acerca de cómo se siente con la reciente maternidad. No obstante, no dude en comunicarse en cualquier momento que sienta tristeza o ansiedad después del nacimiento de su bebé.
Información adicional:
Acerca de la Dra. Sriraman
Natasha K. Sriraman, MD, MPH, FAAP es la autora de Return to You: A Postpartum Plan for New Moms. Es una madre de tres hijos que ha atendido a miles de niños y familias, compartiendo perspectivas sinceras, orientación médica y sabios consejos para ayudar a los padres a explorar los cambios intensos que ocurren en los primeros meses después de que llega el bebé.