Gripe es otro nombre para la influenza. Es una enfermedad causada por un virus respiratorio. La infección puede propagarse rápidamente en las comunidades ya que el virus se transmite de persona a persona
Cuando alguien con gripe tose o estornuda, el virus de la gripe viaja por el aire, y las personas cercanas, incluyendo a los niños, lo pueden inhalar por la nariz o por la boca.
También se puede transmitir el virus cuando su niño toca una superficie dura contaminada, como el pomo de la puerta y luego coloca su mano o los dedos en la nariz o boca o se frota los ojos.
¿Cuándo es la temporada de la gripe?
La temporada de la gripe o influenza suele comenzar en el otoño y terminar en la primavera. Cuando hay un brote o epidemia, generalmente durante los meses de invierno, la enfermedad tiende a ser más fuerte en los niños en edad preescolar o escolar. Los adultos encargados del cuidado de los niños están más expuestos y pueden contraer la enfermedad.
Estos son algunos de los síntomas de la gripe:
Una fiebre repentina (por lo general de más de 100,4 °F o 38 °C)
Escalofríos y temblores
Dolor de cabeza, dolores corporales y sentirse mucho más cansado de lo habitual
Dolor de garganta
Tos seca y áspera
Nariz congestionada y secreciones nasales
Es posible que algunos niños vomiten y tengan deposiciones blandas (diarrea).
Después de los primeros días de estos síntomas, un dolor de garganta, congestión nasal y tos continua, se hacen más evidentes. La gripe puede durar una semana o incluso más. Un niño con un resfriado común generalmente sólo tiene algo de tos, secreción nasal y fiebre baja. Los niños con la gripe, o adultos, de hecho, por lo general se sienten mucho peor, con más dolor y malestar.
El tratamiento de la gripe
A los niños les puede hacer bien descansar más y beber muchos líquidos cuando les da la gripe o influenza.
Si su niño no se siente bien debido a una fiebre, el acetaminofén o el ibuprofeno en las dosis recomendadas por su pediatra para su edad y el peso le ayudará a sentirse mejor. El ibuprofeno está aprobado para el consumo de los niños desde los seis meses de edad en adelante; sin embargo, nunca se les debe dar a los niños que están deshidratados o que están vomitando continuamente.
Es de suma importancia no darle aspirina a un niño que tiene gripe o que se crea puede tener la gripe. La Aspirina durante los episodios de influenza se asocia con un mayor riesgo de desarrollar el síndrome Reye.
Recuperación y complicaciones de la gripe
Las personas sanas, especialmente los niños, se recuperan de la gripe en una semana o dos sin que persistan problemas. Consulte con el médico del niño si sospecha alguna complicación como dolor de oído, presión en la cara o en el cabeza o tos y fiebre que no se mejora.
Prevención de la influenza (gripe)
Todas las personas deben vacunarse contra la gripe anualmente para actualizar su protección. Es la mejor manera de prevenir la gripe. Todos los año se hacen vacunas seguras y la mejor época para obtener la vacuna de la gripe es al finales de octubre, antes de que el virus empiece a circular en su comunidad.
La vacuna antigripal es de especial importancia para:
Los niños, incluidos a los recién nacidos prematuros, desde los 6 meses de edad hasta los 5 años de edad.
Los niños de cualquier edad con enfermedades crónicas que aumentan el riesgo de las complicaciones de la gripe.
Niños pertenecientes a los grupos étnicos de los indígenas americanos o nativos de Alaska.
Los proveedores del cuidado de los niños y todas las personas que tienen contacto con niños con enfermedades de alto riesgo y niños menores de 5 años (especialmente los recién nacidos y menores de 6 meses debido a que no pueden recibir sus propias vacunas).
Todo el personal de la salud/atención médica.
Todas las mujeres que están
embarazadas, están pensando en quedar embarazadas, han dado a luz recientemente o están amamantando durante la temporada de la gripe.
El virus de la gripe se propaga fácilmente por el aire por medio de la tos y los estornudos, y al tocar cosas como pomos de puerta o juguetes y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca.
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La vacuna contra la influenza
Ambas la vacuna inactiva (muerta, también conocida como la "inyección contra la gripe" se inyecta en el músculo, y la vacuna atenuada (viva) en aerosol nasal, pueden ser aplicadas contra la influenza esta temporada, sin preferencia sobre el uso de una o de otra forma de las vacunas en los niños. Cualquiera de estas vacunas pueden ser dadas tan pronto como estén disponibles en la zona donde vive.
Existen dos tipos de vacuna antigripal basadas en el número de cepas del virus de influenza que contenga: Una trivalente (3 cepas = dos del virus A y una del B) y una cuadrivalente (4 cepas = dos del virus A y dos del B). Todas las vacunas disponibles para los niños esta temporada son cuadrivalentes.
Las vacunas antigripales son de especial importancia para los niños que corren alto riesgo de sufrir complicaciones a causa de la gripe tales como aquellos que tienen una enfermedad crónica como el asma, enfermedad cardíaca, sistema inmunitario debilitado debido a una afección primaria o por el uso de medicamentos Corti esteroides, enfermedad renal o diabetes de mellitus.
Todo los niños que cumplen los requisitos puede recibir la vacuna inactivada. Todos los adultos deben aplicarse la vacuna antigripal anualmente; es de vital importancia para los adultos que viven en la misma casa con alguien que corre un alto riesgo de sufrir de complicaciones de la gripe o que está al cuidado de niños menores de cinco años de edad.
Efectos secundarios de la vacuna antigripal:
La vacuna antigripal tiene pocos efectos secundarios, los efectos secundarios más comunes son enrojecimiento, inflamación en el lugar donde se aplicó la inyección, o goteo nasal, congestión y dolor de garganta en el caso de la vacuna en aerosol nasal.
Los niños con alergias al huevo pueden recibir la vacuna contra la influenza. Los niños que han sufrido una reacción alérgica a una dosis de la vacuna antigripal con anterioridad deben ser vistos por un especialistas en alergias. El alergista puede ayudar a los padres a decidir si el niño puede recibir su vacuna anual contra la influenza.