Los bebés también pueden disfrutar de los libros y aprender cuando los comparte con usted. Cuando comparte lecturas con sus hijos más pequeños, puede enseñarles a hablar y a prepararse para escuchar y aprender en la escuela.
Incluya la lectura en la rutina de su bebé a la hora de dormir
Dedique unos pocos minutos de tranquilidad con el televisor apagado como parte de su rutina diaria para ir a dormir. Las rutinas habituales con los bebés a la hora de dormir ayudan a prevenir las peleas futuras para acostarse. Si le enseña a su bebé a dormirse solo y lo acuesta cuando esté despierto evitará que se levante por la noche en el futuro.
Los niños de 6 a 8 meses pueden:
Asir un libro y dar golpecitos sobre las imágenes.
Llevarse un libro a la boca.
Copiar algunos de los sonidos que usted hace y los gestos que ve en su rostro.
Prestar atención a un libro durante algunos minutos a la vez.
Lo que pueden hacer los padres:
Buscar un lugar tranquilo y cómodo para compartir un libro.
Nombrar y señalar las imágenes en las que su hijo muestra interés.
Ayudar a su bebé a pasar las páginas.
Simular las imágenes utilizando su rostro, sus manos y su voz.
Disfrutar del juego de imitar a su bebé cuando juegua con los libros.
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