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Vida sana

Remo

El remo es un deporte para toda la vida, que se practica todo el año y que exige dedicación y entrenamiento intenso. Remar en el agua, en un ergómetro (bicicleta estática) y en tanques de agua bajo techo, además del entrenamiento con pesas y correr son partes fundamentales del entrenamiento integral. Este deporte también se denomina crew (tripulación) en las escuelas preparatorias y universidades de Estados Unidos.

La mayoría de las lesiones de remo se deben a los movimientos reiterativos del deporte. Si bien no todas las lesiones se pueden prevenir, se puede reducir el riesgo de estas.

La siguiente es información de la American Academy of Pediatrics sobre cómo prevenir las lesiones causadas por el remo. También se incluye una descripción general de las lesiones comunes.

Prevención de lesiones y consejos de seguridad

  • Examen físico para deporte. Los atletas deben hacerse una evaluación física antes de participar para asegurarse de que están listos para comenzar el deporte con seguridad. El mejor momento para esta evaluación es alrededor de 4 a 6 semanas antes de comenzar la temporada. Los atletas también deben ver a sus médicos para controles pediátricos de rutina.

  • Estado físico. Los atletas deben mantener un buen nivel de estado físico durante la temporada y fuera de la temporada. El entrenamiento de pretemporada debe dar tiempo para el acondicionamiento general y el acondicionamiento específico del deporte. También es importante hacer ejercicios adecuados de calentamiento y enfriamiento.

  • Técnica. Los atletas deben aprender y poner en práctica técnicas seguras para ejecutar las destrezas que sean esenciales a su deporte. Los atletas deben trabajar con entrenadores e instructores deportivos para lograr la técnica adecuada.

Lesiones comunes

Dolor en la zona lumbar

El dolor en la zona lumbar es muy común entre los remeros. Puede ocurrir súbitamente (por doblarse al levantar el remo o al tirarlo hacia atrás mientras se rema) o con el paso del tiempo (por movimientos reiterativos o cuando la espalda se flexiona hacia adelante). La energía usada para acelerar la parte del impulso de la remada debe provenir de las piernas, pero si las piernas son débiles o no se usan, o si la espalda está en posición curva y floja, es la espalda la que absorberá el peso del esfuerzo. Los atletas que no se sientan lo suficiente erguidos al final de la remada también podrían sentir tensión en la zona lumbar. Remar en un ergómetro podría aumentar la tensión en la espalda si hubiera demasiada resistencia en la máquina o si el atleta tuviera una mala técnica. El entrenamiento con pesas, específicamente los levantamientos olímpicos (sentadillas, cargadas de potencia y levantamiento de pesos muertos) si se hacen de manera incorrecta, o levantar el bote de manera incorrecta para colocarlo y sacarlo del agua, también pueden provocar dolor de espalda.

Entre las lesiones de espalda comunes se incluyen distensión o espasmos musculares, dolor en la superficie articular, patología de los discos lumbares y fracturas por sobrecarga. El tratamiento de estas lesiones incluye reposo, hielo o calor y fármacos antiinflamatorios no esteroides. Si el dolor dura más de 5 a 7 días deberá acudir al médico para que lo evalúe. Los signos de advertencia de una lesión más grave incluyen dolor intenso, adormecimiento u hormigueo en las piernas de arriba a abajo, problemas intestinales o de vejiga o debilidad en las piernas.

Los atletas pueden ayudar a prevenir las lesiones de espalda de las siguientes maneras:

  • Fortaleciendo los músculos abdominales, los glúteos, los músculos de la cadera y las nalgas.

  • Usando la técnica adecuada: posicionamiento correcto al levantar y acabar el movimiento, empujar con las piernas y no con la espalda, no abrirse demasiado rápido durante el impulso y adaptar correctamente las jarcias del bote.

Lesiones en las muñecas

La tendinitis de muñeca (también conocida como síndrome de intersección) es la lesión de muñeca más común que se observa en los remeros. La mano de molinete (la parte interior de la mano que hace girar el remo) se lesiona con mayor frecuencia debido a la extensión reiterada de la muñeca para que la paleta entre y salga del agua.

Entre los síntomas comunes se incluyen dolor, debilidad, hinchazón y chirridos en la muñeca. La aplicación de hielo después de la actividad y el uso de antiinflamatorios no esteroides pueden ayudar con el dolor y la hinchazón. El fortalecimiento de los músculos del omóplato y la técnica o el molinete adecuados pueden reducir el riesgo de lesión.

Vendarse la muñeca para evitar el exceso de extensión durante el molinete también podría ayudar. El uso de una férula en la muñeca cuando no esté remando puede dejar reposar el brazo. A veces, el reposo absoluto es necesario para permitir que el área sane.

 Lesiones en la rodilla

Las lesiones en la rodilla pueden ocurrir cuando se flexionan las rodillas y se sobrecargan al levantar el remo. El dolor de rodillas también puede ocurrir con técnicas inadecuadas durante el entrenamiento con pesas, en particular las sentadillas. El síndrome femororrotuliano por esfuerzo (dolor en la rótula) y el síndrome de la cintilla iliotibial (dolor en la parte externa de la rodilla) pueden ocurrir cuando se aumenta la carga y se flexiona demasiado la rodilla al levantar el remo. El tratamiento inmediato consiste en el uso de hielo y antinflamatorios no esteroides. El fortalecimiento de la parte central del cuerpo, en especial los músculos rotadores de la cadera, deben ser parte del tratamiento. La modificación de los zapatos o la posición del extensor para pies, y la disminución de la flexión de las rodillas al levantar el remo, pueden reducir los síntomas.

Dolor en las costillas

El dolor en las costillas puede ocurrir en los músculos, entre las costillas o en el hueso. Pueden ocurrir distensiones musculares al usar reiterativamente y tirar del mismo músculo del pecho. Los atletas con musculatura débil en la espalda, pero músculos fuertes en el pecho podrían cargar de forma despareja los músculos o el hueso, lo que provoca dolor. Los movimientos reiterativos pueden sobrecargar el hueso y causar una reacción o fractura por sobrecarga. Remar con paletas en forma de hacha podría aumentar las fuerzas sobre la pared torácica.

El dolor óseo asociado a fracturas costales por sobrecarga puede ocurrir al remar, en reposo o al respirar en profundidad. Las radiografías suelen ser normales si los síntomas han estado presentes menos de 3 a 4 semanas, por lo que tal vez sea necesario hacer una resonancia magnética (RM) para diagnosticar una fractura costal por sobrecarga. El hielo y los medicamentos para el dolor pueden ayudar con el dolor inicial.

El tratamiento incluye reposo, fortalecimiento de los músculos circundantes y evaluación de la técnica de remo. No sentarse lo suficientemente erguido al final del movimiento, empujar demasiado hacia la caja torácica al final del movimiento o extenderse demasiado al levantar el remo podrían predisponer a los remeros a sufrir fracturas costales por sobrecarga. Habrá que evaluar y cambiar las jarcias del bote si fuera necesario. A veces, los remeros cambian de lado del bote (estribor o babor) para reducir la tensión en un determinado lado del pecho.

 Ampollas

Las ampollas son un problema común en los remeros novatos. Suelen aparecer en la base de la palma de la mano o justo por debajo de los dedos, donde se unen con la palma. Las ampollas suelen formarse por la fricción al levantar y bajar el remo. En los remeros con más experiencia, se forman callos donde alguna vez hubo ampollas.

Las ampollas pueden infectarse, en especial tras quedar expuestas a la suciedad o al agua de río, por lo que es necesario cuidarlas debidamente. Entre los signos de infección se incluyen hinchazón y enrojecimiento alrededor de la zona, supuración y aumento del dolor. Las ampollas deben mantenerse limpias y secas. Resulta útil lavarse las manos y usar ungüentos antibacterianos. Cuando las ampollas están llenas de líquido hay que drenarlas, pero mantener intacta la piel que las recubre para proteger la superficie contra más daños.

Se puede usar cinta adhesiva para cubrir las ampollas y evitar que se formen nuevas, pero hay que tener cuidado ya que la cinta misma podría provocar la formación de una nueva ampolla. La cinta nunca puede tener arrugas, debe envolverse alrededor de toda la mano y ser más grande que la ampolla que se está cubriendo. No es práctico usar guantes al remar.

Lastimaduras por rozamiento

Las lastimaduras por rozamiento son irritaciones que ocurren en la parte trasera de las pantorrillas cuando las piernas golpean contra el deslizador al acabar un movimiento. Puede haber rasguños, ampollas y sangrado. Vendar el área con cinta adhesiva, reacomodar los extensores de pies y el deslizador y no agarrotar las piernas al final del movimiento pueden evitar esta lesión. Hay que tener cuidado para evitar infecciones.

El ciclo de movimiento del remo

Posiciones para remar

  • Remada tipo "barrido": cada remero tiene un remo y se ubica a estribor (a la derecha) o a babor (a la izquierda).
  • Remada tipo doble "scull": cada remero tiene 2 remos.

  • Acabado: el principio de la remada, cuando el remero está sentado con la espalda recta y los brazos flexionados, moviendo el remo hacia afuera del agua.

  • Recuperación: recorrido constante por el deslizador mientras se sostiene el bote con la quilla a nivel y las paletas fuera del agua.

  • Levantamiento: el remero se acerca a la parte superior del deslizador con las rodillas flexionadas y baja el remo para levantar el agua.

  • Impulso: empujón generado por el levantamiento en el que se usan las piernas, la espalda y los brazos para lograr con potencia el acabado.

Recuerde

Las lesiones por remo se pueden evitar cuando los atletas usan el equipo de seguridad adecuado y se cumplen las pautas de seguridad.

 

Última actualización
9/5/2019
Fuente
Care of the Young Athlete Patient Education Handouts (Copyright © 2011 American Academy of Pediatrics)
La información contenida en este sitio web no debe usarse como sustituto al consejo y cuidado médico de su pediatra. Puede haber muchas variaciones en el tratamiento que su pediatra podría recomendar basado en hechos y circunstancias individuales.
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