Realmente no hay "una mejor forma" para tomarle la temperatura a un niño de 2 años de edad. Cada termómetro tiene sus ventajas y desventajas. Independientemente del tipo de termómetro que use, cerciórese de que tenga un lector digital para que puede interpretar fácilmente el resultado. También es recomendable tener pilas adicionales a la mano.
Opciones de termómetros:
Los termómetros temporales (los que se usan en la frente y en las sienes) son cada vez más populares debido a la facilidad con que se pueden usar y la rapidez del resultado. Nuevos estudios de investigación sugieren que los termómetros temporales son precisos incluso para niños pequeños hasta de 3 meses, lo que hace de estos termómetros una buena opción para un niño de 2 años de edad.
Los termómetros de oído (timpánicos) pueden ser otra opción para los niños mayores de 6 meses de edad. Este tipo de termómetro es fácil de usar y puede ser muy fiable si se coloca correctamente y no hay cera o cerilla del oído de por medio.
Los termómetros digitales orales se convierten en una buena opción cuando el niño crece.
Tomar la temperatura de un niño es una tarea difícil a cualquier edad. Tener las herramientas adecuadas puede facilitar este trabajo.
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