La fiebre maculosa (o manchada) de las Montañas Rocosas (FMMR) es una enfermedad bacteriana que se propaga a través de la picadura de una garrapata infectada. Se descubrió en las montañas del oeste de los Estados Unidos. Así es como la enfermedad recibió su nombre. Ocurre en todo el país, en especial en los estados del Atlántico medio y del sur.
La enfermedad se puede dar en niños de cualquier edad. Quienes pasan mucho tiempo al aire libre o tienen mascotas que podrían ser portadoras de garrapatas infestadas corren más riesgo de tener fiebre maculosa de las Montañas Rocosas. Las infecciones pueden ocurrir en cualquier época del año, pero en la mayoría de las zonas, los casos se producen entre mayo y agosto o cuando el clima es cálido.
Brote de fiebre maculosa de las Montañas Rocosas en México
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades están advirtiendo sobre un
brote (en inglés) de fiebre maculosa de las Montañas Rocosas en personas que han viajado o viven en Tecate, México, desde julio de 2023. Por lo menos cinco personas fueron hospitalizadas y tres personas fallecieron. Cuatro de las infecciones se dieron en personas menores de 18 años. Si usted o un miembro de su familia ha viajado a Tecate u otra ciudad en el norte de México y desarrolla síntomas durante el viaje o dentro de las dos semanas posteriores a su regreso a casa, busque atención médica. Obtenga más información sobre el brote
aquí (en inglés).
¿Cómo se contagia la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas?
Por lo general, los niños contraen fiebre maculosa de las Montañas Rocosas por la picadura de una garrapata infestada con una bacteria llamada
Rickettsia rickettsii. Entre las garrapatas que propagan esta bacteria con más frecuencia se incluyen la
garrapata americana del perro,
la garrapata de la madera de las Montañas Rocosas y la
garrapata café del perro (en inglés).
Signos y síntomas de la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas
Los síntomas de la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas suelen aparecer aproximadamente 1 semana después de la picadura de la garrapata, pero esto puede variar desde 2 días hasta 2 semanas.
Los síntomas comunes son
similares a los de la gripe, e incluyen
fiebre, dolor muscular,
dolores de cabeza,
vómitos, náuseas y pérdida de apetito.
Suele aparecer un
sarpullido alrededor del sexto día de enfermedad. El
sarpullido de la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas tiende a aparecer primero en las muñecas y en los tobillos del niño, pero en pocas horas puede propagarse al torso. También podría propagarse a las palmas de las manos y las plantas de los pies. A menudo comienza como manchas rojas o puntitos rojos planos, pero podrían cambiar y volverse abultados o morados.
Entre
otros síntomas se pueden incluir dolor en las articulaciones, dolor de estómago y diarrea. En casos graves, puede que baje mucho la presión arterial y eso haga que el niño se muestre confundido. A medida que se propaga la infección, varios órganos podrían resultar afectados, incluido el cerebro.
¿Cuándo llamar a su pediatra?
Si a su hijo lo picó una garrapata y presenta alguno de estos síntomas, llame de inmediato al pediatra. El médico revisará al niño y le hará pruebas para confirmar el diagnóstico de fiebre maculosa de las Montañas Rocosas.
¿Cómo se trata la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas?
Si el pediatra sospecha que su hijo tiene fiebre maculosa de las Montañas Rocosas, le recetará un antibiótico llamado doxiciclina. El tratamiento con el medicamento para la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas suele prolongarse de 7 a 10 días o hasta que el niño haya dejado de tener fiebre por lo menos durante 3 días. Es importante que su hijo tome toda la medicación que se le recete para eliminar la infección.
Con un tratamiento temprano, casi todos los niños se recuperan completamente. En casos excepcionales, la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas puede causar enfermedades graves e incluso ser mortal. Si la infección no se trata, puede provocar daños en los vasos sanguíneos, en los nervios y en órganos tales como el corazón, los pulmones y los riñones. No recibir el tratamiento adecuado para la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas puede generar otros problemas graves, como la pérdida de audición o visión, y
gangrena en los dedos de las manos y de los pies que podría llevar a la amputación.
¿Cómo evitar la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas?
No existe una vacuna para evitar la FMMR. La mejor manera de prevenir la enfermedad es evitar las picaduras de garrapatas. Las garrapatas viven en el césped, los arbustos, las malezas, las áreas boscosas y en animales. Si planea pasar tiempo al aire libre, use pantalones largos y sombrero; lo ideal es que sean de colores claros para que las garrapatas sean más fáciles de detectar. Evite usar sandalias.
Aquí hay más consejos para proteger a su familia de las garrapatas.
Utilice productos repelentes de insectos que hayan sido registrados por la Agencia de Protección Ambiental
(EPA, por sus siglas en inglés) y siempre siga las instrucciones. El DEET se considera la mejor defensa contra las garrapatas. Obtenga más información sobre el DEET y otros repelentes de insectos para bebés y niños aquí.
Evite que las mascotas tengan garrapatas. Sus
mascotas (en inglés) pueden traer garrapatas a la casa. Use un producto preventivo contra pulgas y garrapatas en sus mascotas y revise su pelaje en busca de garrapatas o señales de picaduras de garrapatas.
Mantenga una higiene adecuada. Cuando su hijo entre a la casa, lávele la piel expuesta al repelente de insectos con agua y jabón. Un baño o una ducha también pueden ayudar a desprender las garrapatas sueltas, ya que tardan de 4 a 6 horas en quedar prendidas con firmeza a la piel.
Haga una revisión para encontrar garrapatas. Revise diariamente en busca de garrapatas, especialmente debajo de los brazos, dentro y alrededor de las orejas, en el ombligo, detrás de las rodillas, entre las piernas, alrededor de la cintura y en la línea del cabello y el cuero cabelludo.
Quite las garrapatas. Si encuentra una garrapata en la piel de su hijo, cuanto antes la quite, menos probable será que transmita la infección que podría tener. Pero es importante
quitarla con cuidado.
Recuerde
La fiebre maculosa de las Montañas Rocosas es relativamente poco común, pero puede ser grave si no se la trata con rapidez. En particular si vive en una zona con infestación por garrapatas, tome medidas para prevenirla y conozca los síntomas. La fiebre maculosa de las Montañas Rocosas se puede desarrollar en personas que no saben que han sido picadas por una garrapata. Llame al pediatra de inmediato si algo le preocupa.
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