El dolor que sienten los recién nacidos debido a procedimientos rutinarios puede ser considerable, especialmente en los bebés prematuros que tienen necesidades de salud más significativas.
Los estudios de investigación sugieren que la exposición repetitiva al dolor en la vida temprana puede crear cambios en el desarrollo del cerebro y el sistema de respuesta al estrés del organismo que pueden repercutir durante la niñez. Debido a esto, una nueva declaración de política de la American Academy of Pediatrics recomienda a todos los establecimientos que se encargan del cuidado del los recién nacidos a que usen estrategias para minimizar el número de procedimientos dolorosos y a que revisen rutinariamente y traten al dolor con mayor énfasis utilizando intervenciones comprobadas sin medicamentos.
La declaración de política, "La prevención y el control del dolor de los procedimientos en neonatos: Una actualización", será publicada en el número de febrero de 2016 de Pediatrics (publicada en línea el 25 de enero). Los autores de la declaración dicen que darles de rutina sacarosa y glucosa a los recién nacidos para reducir del dolor durante los procedimientos es eficaz, pero se cree que su uso excesivo pueda afectar el desarrollo neurológico. Al mismo tiempo, los autores dicen que intervenciones seguras y eficaces tales como el contacto piel con piel y la lactancia siguen siendo poco utilizados.
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