Las "fórmulas" unfantiles que se promocionan como bebidas nutritivas para bebés mayores o niños en edad de preescolar generalmente son innecesarias y nutricionalmente incompletas y las prácticas de comercialización que las promueven son cuestionables, según la American Academy of Pediatrics.
La AAP ha publicado un informe clínico nuevo, "Fórmulas para bebés mayores y niños pequeños", que revisa la creciente variedad de bebidas dirigidas a niños de 6 a 36 meses de edad y observa que carecen de estandarización o supervisión regulatoria.
Lo que debe saber sobre las fórmulas de "seguimiento" y de destete
"Los productos que se promocionan como 'fórmulas complementarias', 'fórmulas de destete' o 'leches y fórmulas para infantes' se publicitan engañosamente como una parte necesaria de la dieta de un niño saludable o, en el caso de aquellas dirigidas a bebés pequeños, como equivalentes a la fórmula infantil", afirmó el autor principal, George J. Fuchs, III, MD, FAAP, miembro del Comité de Nutrición, que produjo el informe clínico.
"Estas bebidas no deben reemplazar una dieta equilibrada, son inferiores a la fórmula infantil estándar para niños menores de 12 meses de edad y no ofrecen ningún beneficio por sobre la leche de vaca, mucho menos costosa, en la mayoría de los niños mayores de 12 meses. Algunos niños también podrían tener necesidades nutricionales especiales, y como con cualquier niño, siempre es mejor consultar con su pediatra".
La AAP apoya la continuación de la lactancia materna junto con los alimentos complementarios apropiados que se introducen aproximadamente a los 6 meses de edad, siempre que la madre y el niño lo deseen mutuamente durante 2 años o más. Si el bebé no es amamantado, la AAP y otros recomiendan la leche entera de vaca como adecuada para bebés a partir de los 12 meses de edad como parte de una dieta nutricionalmente completa y equilibrada.
Cuando se necesitan fórmulas médicas o terapéuticas especiales
Aunque las fórmulas médicas o terapéuticas están indicadas para una variedad de afecciones (tales como enfermedades gastrointestinales crónicas, trastornos metabólicos, alergias alimentarias y otras), dichas fórmulas recetadas son diferentes de las "fórmulas" para bebés mayores y niños pequeños.
"Es comprensible que las familias y los cuidadores se sientan confundidos por los diferentes nombres, composiciones y supuestos beneficios de estas llamadas fórmulas", afirmó Steven A. Abrams, MD, FAAP, coautor del informe. "Algunas de las bebidas para infantes tienen un alto contenido de azúcar. Y, encima, suelen ser más caras que la leche de vaca".
Hasta el momento, Estados Unidos no tiene supervisión regulatoria para garantizar que las fórmulas para este grupo etario cumplan con un conjunto de estándares uniformes.
Recomendaciones de la AAP:
La porción líquida de la dieta para los bebés menores de 12 meses debe ser proporcionada por leche humana o fórmula infantil estándar, que en los EE. UU. ha sido revisada por la FDA en función de la Ley de Fórmula Infantil (Infant Formula Act).
Para los infantes (niños de 12 meses en adelante), los cuidadores deben proporcionarles una dieta variada con alimentos fortificados para optimizar la ingesta nutricional. Las "fórmulas" para bebés mayores y niños pequeños se pueden utilizar de forma segura como parte de una dieta variada para niños, pero no proporcionan una ventaja nutricional en la mayoría de los niños frente a una dieta bien equilibrada que incluya leche humana o leche de vaca.
El marketing de estas bebidas debe hacer una distinción clara e inequívoca de la fórmula infantil estándar en los materiales promocionales, logotipos, nombres de productos y envases. No deben colocarse junto a la fórmula infantil en los estantes de las tiendas.
Los pediatras deben realizar una evaluación nutricional específica de los niños y ofrecer ajustes en la ingesta de alimentos sólidos o suplementos vitamínicos según sea necesario.
Hable con el pediatra de su hijo
"Todos conocemos a los niños quisquillosos con la comida. Y podría haber razones por las que algunas familias evitan la leche de vaca y los productos lácteos", dijo el Dr. Fuchs. "Por eso es importante pedirle a su pediatra que evalúe si los niños reciben todos los nutrientes que necesitan. Juntos pueden analizar un plan para abordar cualquier deficiencia potencial".
El informe clínico se publicará en la edición de noviembre de 2023 de Pediatrics. Los informes clínicos creados por la AAP están escritos por expertos médicos, reflejan la evidencia más reciente en el campo y pasan por varias rondas de revisión de pares antes de ser aprobados por la Junta Directiva de la AAP y publicados en Pediatrics.
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