La lucha es real. Lo niños en edad preescolar están aprendiendo a ser independientes, pero la independencia toma práctica (con su orientación). A esta edad, los niños todavía no tienen el control o la concentración para poder cepillarse los dientes solos. Los padres necesitan vigilarlos y ayudarlos para que el cepillo elimine la placa (sarro) que causa la caries dental. Como es de suponer, el problema principal relacionado con la salud dental de los niños en edad preescolar es la caries dental.
Es mejor que usted ponga la pasta dental en el cepillo hasta que su niño tenga casi 6 años de edad. Hasta que los niños cumplan 7 o 8 años de edad, usted tendrá que ayudarlos a cepillarse los dientes. Trate de cepillarles los dientes primero y deje que terminen ellos de hacerlo.
Aquí ofrecemos 6 consejos rápidos y útiles para enfrentar estos problemas a la hora del cepillado:
Recomendación número 1: ¡Recuerde que a muchas personas les pasa lo mismo!
Su niña reacia está atravesando una transición psicológica y es muy normal que ella trate de retarla y de "ponerla a prueba". Con el tiempo, esta etapa pasará y su estilo de crianza dictará cómo ella va a reaccionar. Su niña en edad escolar puede estar usando el cepillo como un arma para determinar tener cierto control. En lugar de alimentar este ciclo de frustración con peleas en la mañana o en la noche, acepte que este es un proceso normal y trate de establecer una rutina que sea parte fija de su rutina diaria. Siga leyendo para obtener consejos prácticos de cómo lograrlo.
Recomendación número 2: Siga la rutina, baño, libro, cepillarse y cama o (Cepillarse, Libro, Cama)
Después de un largo día, las rutinas nocturnas son por lo general practicadas por padres muy cansados. Su niña en edad escolar está cansada e irritable y lo último que usted quiere hacer es otra pelea a la hora del cepillado. ¿Le resulta familiar? ¿Necesita una solución? ¡Le tiene que poner nombre, para que lo pueda lograr!
En nuestra casa, la rutina nocturna se llama: "baño, libro, cepillo, cama" —No decimos, es hora de dormir." Toda la familia entiende esta "jerga","Es la hora del baño, libro, cepillo, cama". El orden de estas actividades ayuda a nuestras niñas a calmarse y a sentirse dispuestas lo mejor posible a hacer la transición para ir a la cama (y para cepillarse los dientes). Ponerle nombre le da un clara noción de lo que puede esperar y le da cierto grado de control. Un niño que sabe a que atenerse tiende a responder mejor y quizá no trate de imponer su voluntad tanto.
Decida cuál secuencia funciona mejor para su familia y cerciórese de ponerle nombre y de llevarla a cabo sin cambiarla mucho todas las noches. El orden (o incluso qué padre realiza cada parte de la secuencia) debe ser parte de la rutina tanto como le sea posible. Además, recuerde que lo último que debe tocar los dientes antes de ir a la cama es el cepillo dental —no refrigerios o líquidos fuera de agua después del cepillado. Aquí le ofrecemos más consejos sobre Cepillarse, Libro, Cama.
Recomendación número 3: ¡Ver para creer!
Un simple calendario colgado en la habitación del niño también puede marcar la diferencia. Hay varias opciones listas para imprimir. Esta es la usamos (en inglés) en nuestra casa. Los calendarios para el cepillado les ofrecen a los niños una prueba visual y le dan cierto control –así como para ver el progreso que los llevará a una recompensa (refuerzo positivo). Por supuesto, un calendario no funcionaría con un niño de 2 años, pero los niños mayores de 3 pueden responder muy bien a esta táctica. Colocar una calcomonía de una "carita feliz" después de cada sesión de cepillado les da a los niños los hace sentir que tienen un poco de control. Es una táctica simple y por lo general muy eficaz.
Recomendación número 4: Traer lo necesario a donde está el niño
Esta sugerencia me ha evitado muchas dificultades a la hora del cepillado. Cuando una de nuestras hijas se duerme en el automóvil en la noche, por ejemplo o se enferma o simplemente tuvo un día difícil, yo le traigo el cepillo y la ceda dental a la cama. Continuamos así con nuestra rutina del cepillado y de usar la seda dental tanto como podemos, pero en lugar de cepillarse en el baño, usamos una pequeña cantidad de pasa dental —untar el cepillo con la pasta dental del tamaño de un grano de arroz para niños menores de 3 años y o del tamaño de una arveja o guisante para los niños mayores— y una toalla de papel absorbente para escupir al final.
Básicamente, le cepillo sus dientes cuando ya está acostada en su cama. Incluso con mala iluminación, un niño acostado puede estar una posición de ventaja para que usted pueda controlar esa cabecita cansada que no quiere cooperar. De esta forma, puede tener acceso a su boca para limpiar y terminar fácilmente. De esta forma también dejará una capa de pasta dental sobre su esmalte, ya que no podrán enjugarse o escupir. ¡Sin embargo, esta es una técnica que recomiendo con frecuencia para ayudar a mantener los dientes sanos y fuertes!
Recomendación número 5: Cepillarse después del desayuno en mañas de apuro
La mayoría de los padres están apurados de tiempo en las mañanas tratando de que todos estén listos para ir al centro de cuidado infantil, escuela y trabajo. Así pues, que en realidad muchos padres no le cepillan los dientes a sus niños en la mañana. Los que lo hacen, por lo general sacan tiempo antes del desayuno. El problema de cepillarse antes del desayuno es que los residuos de alimentos quedarán en los dientes del niño para el resto del día. Si el alimento es pegajoso o azucarado, puede ocasionar caries dentales.
Aunque cepillarse antes del desayuno es mejor que no hacerlo, si puede, trate el cepillado después de que terminen el desayuno. Como último recurso, puede tratar de utilizar la misma técnica mencionada en la Recomendación número 4 y "tener lo necesario a mano" Por ejemplo, puede cepillarle los dientes a su niño después de haberle abrochado el cinturón de seguridad en el automóvil antes de llevarla al preescolar. Recuerde que debe llevar después el cepillo de dientes a la casa para enjuagarlo, limpiarlo y para que se seque al aire.
Recomendación número 6: Tomar agua
Si su niño en edad preescolar ha tenido un "mal día" y usted sabe que no va querer cepillarse los dientes, trate de por lo menos de ofrecerle un vaso de agua (preferiblemente con fluoruro) después de comer o antes de ir a la cama. Esto le lavará el residuo de algunos alimentos y cubrirá los dietes con flouroro en lugar de darle bebidas azucaradas, tales como el jugo o zumo. ¡Tomar agua en lugar de bebidas azucaradas es saludable y otra buena rutina para fomentar cuando los niños están pequeños!
Información adicional de HealthyChildren.org: