¿Cuál es la mejor forma para dormir a mi bebé?
Bebés
Los bebés no tienen ciclos regulares de sueño hasta aproximadamente los 6 meses de edad. Si bien los recién nacidos duermen aproximadamente de 16 a 17 horas al día, es posible que sólo duerman de 1 o 2 horas seguidas. A medida que los bebés crecen necesitan
dormir menos. Sin embargo, cada bebé tienen necesidades diferentes de sueño. Es normal que un niño de 6 meses de edad se despierte durante la noche pero vuelva a dormirse después de algunos minutos.
A continuación le ofrecemos algunas sugerencias que pueden ayudar a su
bebé (y a usted) a dormir mejor por las noches.
Mantenga a su bebé calmado y en silencio cuando lo alimenta o lo cambia durante la noche. Intente no estimularlo o despertarlo demasiado.
Juege con el bebé durante el día. Hablar y jugar con su bebé durante el día ayudará a extender las horas que permanece despierto. Esto lo ayudará a dormir durante períodos más largos durante la noche.
Coloque a su bebé en la cama cuando esté adormilado pero aún esté despierto. Esto ayudará a su bebé a aprender a dormirse por sí solo en su propia cama. Sostenerlo o mecerlo hasta que esté completamente dormido puede dificultarle volver a dormirse si se despierta durante la noche.
Espere algunos minutos antes de responder a las quejas de su hijo. Espere a ver si puede dormirse solo. Si continúa llorando, vea qué le pasa pero no encienda la luz, no juegue con él ni lo levante. Si se desespera o no puede calmarse, considere qué más puede estar molestándole. Es posible que tenga hambre, haya mojado o ensuciado el pañal, esté afiebrado o no se sienta bien.
Niños pequeños y en edad preescolar
Para muchos padres la hora de dormir de sus
niños pequeños puede ser la parte más difícil del día. Los niños de esta edad a menudo se resisten a ir a dormir, especialmente si tienen hermanos más grandes que aún están despiertos. Siga los siguientes consejos para ayudar a su niño pequeño a fomentar buenos hábitos para dormir.
Establezca una rutina tranquila antes de la hora de dormir para ayudar a su hijo a que entienda que pronto será hora de ir a dormir. Aproveche esta ocasión para leerle una historia, escuchar música tranquila o darle un baño. Puede ser tentador jugar con su hijo antes de ir a dormir. Sin embargo, los juegos activos pueden hacer que su hijo esté demasiado agitado para dormir.
Sea constante. La hora de dormir debe ser la misma todas las noches. Esto ayuda a su hijo a saber qué esperar y lo ayuda a establecer patrones de sueño saludables.
Permita que su hijo se lleve algo favorito a la cama todas las noches. Puede dejar que su hijo duerma con un osito de peluche, una manta especial o algún otro juguete favorito. Estos a menudo ayudan a que los niños se duerman, especialmente si se despiertan por la noche. Asegúrese de que el objeto sea seguro. Busque listones, botones y otras piezas que puedan presentar algún
riesgo de asfixia. El relleno o las bolitas dentro de los juguetes de peluche también pueden ser peligrosos.
Asegúrese de que su hijo esté cómodo. Pregúntele si quiere un poco de agua o que deje una luz prendida o deje la puerta entreabierta. Intente encargarse de las necesidades de su hijo antes de la hora de ir a dormir de forma que no las use como excusas para ir a dormir.
No deje que su hijo duerma en la misma cama con usted. Esto puede hacer que sea más difícil para él o ella dormirse cuando está solo.
No regrese a la habitación de su hijo cada vez que se queja o lo llame. Intente lo siguiente en su lugar:
Espere varios segundos antes de responder y demore su respuesta cada vez que lo llame. Esto le dará la oportunidad de dormirse solo.
Tranquilice a su hijo diciéndole que usted está ahí si lo necesita. Si necesita entrar a la habitación no encienda la luz, no juegue con él ni se quede demasiado rato.
Aléjese cada vez más lejos de la cama de su hijo cada vez que entre a su cuarto hasta que pueda tranquilizarlo hablando sin entrar a su habitación.
Recuérdele cada vez que la llame que es hora de dormir.
Dele tiempo. Ayudar a su hijo a fomentar buenos hábitos para dormir puede ser un desafío y es normal enojarse cuando un niño lo mantiene despierto durante la noche. Trate de ser comprensivo . Una respuesta negativa de un padre a veces puede empeorar el problema para dormir.